De los distintos tipos de dolor de cabeza o cefalea, la migraña es uno de los más frecuentes. Las causas que lo provocan son desconocidas, pero sí se conocen algunos factores desencadenantes.
La migraña o jaqueca es el segundo tipo de cefalea o dolor de cabeza más frecuente, afectando a un 12-16% de la población mundial.
Se trata de un dolor que a menudo resulta incapacitante para quienes lo sufren, que incluso puede obligar a modificar o suspender las actividades cotidianas, siendo una causa importante de absentismo laboral.
Las crisis de dolor de la migraña pueden durar entre 4 y 72 horas, y a menudo se acompaña de otros síntomas como náuseas, vómitos o hipersensibilidad ante estímulos auditivos y visuales.
Aparece en forma de dolor pulsátil de afectación unilateral, aunque a veces puede afectar a ambos lados de la cabeza. Los episodios de jaqueca cursan con dolor moderado que puede intensificarse cuando se acerca la noche.
Migraña con y sin aura
La International Headache Society distingue entre migraña sin aura, la más frecuente, y migraña con aura.
El aura se entiende como un conjunto de síntomas que preceden al propio episodio de migraña a modo de aviso, y que suelen presentarse entre 20 y 60 minutos antes de que aparezca la crisis.
Estos síntomas pueden variar de una persona a otra, y suelen incluir visión borrosa, pérdida parcial del campo de visión o luces brillantes. También hay quien sufre otros síntomas como hormigueo o entumecimiento.
Cuando la migraña aparece durante 15 días o más al mes en un periodo de tres meses, se considera migraña crónica.
Causas de la migraña o jaqueca
Aunque se desconoce cuál es la causa concreta que produce la migraña se sabe que el dolor se produce debido a la inflamación y dilatación de algunas arterias cerebrales.
Hay factores que pueden ser desencadenantes para algunas personas, siendo los más destacados:
– Antecedentes familiares. Es frecuente que la persona afectada de migraña cuente con miembros de su familia que también la padecen o la han padecido, por lo que se sabe que tiene relación con la genética familiar.
– Motivos ginecológicos. Aunque la migraña puede afectar a ambos sexos, el hecho de ser mujer puede ser un factor desencadenante, debido a los cambios hormonales. Influyen la menstruación o los anticonceptivos, entre otros.
– Sensibilidad ante estímulos. Hay personas a las que la exposición a ciertos estímulos les produce migraña. Estos estímulos pueden ser auditivos (exceso de ruido), visuales (luces muy fuertes o brillantes), olorosos (olores intensos) o climatológicos, entre otros.
– Ingestión de algunos alimentos. Aunque pueden variar de una persona a otra, hay alimentos que pueden favorecer la aparición de migraña, como algunos quesos, el chocolate, los cítricos, los frutos secos, el café y las bebidas alcohólicas, entre otros.
– Estado afectivo y emocional. Las emociones juegan un papel muy importante en los episodios de migraña, ya que situaciones de ansiedad, angustia y sensaciones que crean malestar, pueden influir en las crisis de migraña.