La lumbalgia o lumbago es el dolor localizado en la parte inferior o baja de la espalda, cuyo origen tiene que ver con la estructura músculo-esquelética de la columna vertebral. Es uno de los dolores más frecuentes y cuando aparece la movilidad puede verse reducida. Pero hay formas de tratarlo y sobre todo, de prevenirlo siguiendo algunas pautas sencillas.
El lumbago afecta la zona más baja de la columna vertebral y representa hasta un 70% de las consultas médicas por dolor de espalda.
Aunque su causa es muy variada y en ocasiones es difícil encontrar el origen del dolor, esto no significa que haya que resignarse, ya que existen tratamientos. Pero también es muy importante la prevención.
Consejos para prevenir el lumbago
Es inevitable el progresivo deterioro del cuerpo con el paso de los años, pero existen otros muchos factores que pueden ayudar a prevenir el lumbago.
Estas son algunas de las recomendaciones para evitar el lumbago fácilmente aplicables a las actividades cotidianas:
1. Cuidar la alimentación. Una alimentación sana y equilibrada es la base para una buena salud. Los alimentos ricos en vitamina B son buenos aliados para prevenir el dolor de espalda. Cereales, legumbres y productos de origen animal son muy recomendables.
2. Mantener un peso adecuado. Es la mejor forma de proteger la salud de la espalda, y del cuerpo en general. Las vértebras y articulaciones se verán muy beneficiadas.
3. Buena higiene postural. Gestos tan sencillos como sentarse en la silla con la espalda recta, elegir asientos ergonómicos, flexionar las piernas al agacharse y evitar los movimientos bruscos y repetitivos es fundamental para prevenir el lumbago.
4. Practicar ejercicio. Realizar ejercicio con regularidad aporta grandes beneficios. Nadar, ir en bicicleta, caminar o hacer estiramientos en casa son actividades que fortalecen el cuerpo y tonifican la espalda. Incluso si aparece el dolor de lumbago, es conveniente mantener cierta actividad de forma moderada.
5. Disminuir el estrés. El estrés influye notablemente en la salud corporal y el dolor de espalda, ya que produce tensión. Es recomendable por tanto, si se padece estrés, utilizar técnicas de relajación como practicar yoga o mindfulness.
6. Dormir bien. El descanso es la base del bienestar para el cuerpo. Descansar las horas necesarias y hacerlo en la postura correcta es muy importante. Dormir con un cojín bajo el cuello y otro entre las rodillas facilita el descanso y ayuda a prevenir el lumbago.
Si aún siguiendo estos consejos el dolor aparece, es conveniente consultar al médico o farmacéutico, quien indicará las pautas a seguir o el tratamiento más adecuado para aliviar el dolor.